En mayo escribí en este mismo espacio una entrada
titulada “Líderes sindicales” (http://novirtueorzen.blogspot.mx/2012/05/lideres-sindicales.html ),
tras plantear de manera general la situación en torno a la vida sindical y los
fallidos intentos de regularla a través de una Reforma Laboral, concluí que este asunto parecía no tener arreglo a corto plazo. Afortunadamente el panorama
ha cambiado –gracias a la recién aprobada Reforma Política, que describiré a
continuación– y el tema de la transparencia sindical es el primero en la agenda legislativa.
El miércoles 18 de julio, la Comisión Permanente del
Congreso de la Unión formuló la declaratoria de aprobación de la Reforma
Política. A pesar de que se quedaron afuera propuestas importantes como la
reelección de presidentes municipales y legisladores, o la propuesta de reducir
el número de diputados plurinominales, la reforma incluye modificaciones que ya
están teniendo un impacto en la presente legislatura y que pusieron a trabajar
a diputados y senadores desde el primer día.
Entre otras cosas, la Reforma incluye: alternativas para
la toma de protesta al Presidente de la República (en caso de que a la
izquierda le dé por repetir el teatro de 2006), iniciativa ciudadana, consulta
popular y la que me ocupa hoy: la facultad de “iniciativa preferente” para el
ejecutivo. Esta consiste en otorgarle al Presidente la posibilidad de enviar
dos iniciativas (ya sean nuevas o elegir dos que estén pendientes de dictamen)
al Congreso para que en un periodo máximo de 30 días sean discutidas y votadas.
El presidente Felipe Calderón hizo uso de esta facultad y
el 1ro de septiembre presentó dos iniciativas. Una al Senado y otra a la Cámara
de Diputados (después de votarlas habrán de intercambiarlas). La más
controversial es la de Reforma Laboral. Esta es muy similar a la presentada
anteriormente por el PAN y tiene muchos puntos en común con otra promovida por
el PRI. La diferencia principal es de carácter político. El Presidente propone
que los sindicatos que cuenten con más de 150 miembros sean fiscalizados por
auditores externos, así como el voto libre y secreto en la elección de las
directivas sindicales. Ambas medidas buscan transparentar la vida sindical para
evitar que continúen los abusos de parte de líderes vitalicios que han hecho
fortunas a costa de los trabajadores.
Parecía que este
tema iba a desaparecer de la agenda durante todo el sexenio de Peña Nieto,
afortunadamente el todavía Presidente Calderón logró introducirlo no sólo a
discusión en el pleno sino a la agenda pública. Esta propuesta es particularmente interesante porque nos permitirá saber dónde se encuentra parado
el Presidente electo Peña. Si logra presionar para que el PRI apruebe la
Reforma –situación que veo casi imposible-,tendrá argumentos para demostrar que
el suyo es de verdad un nuevo PRI y que no cederá ante presiones, incluso de su
propio partido. En caso de que no sea aprobada, o se apruebe una versión
diluida, quedará claro que los poderes de facto siguen teniendo una gran
influencia en ese partido. No creo
exagerar al decir que esto marcará la presidencia de Peña, tiene mucho que
ganar o mucho que perder.
Es interesante ver también la reacción de la izquierda.
López Obrador (¿Quién más?) ha dicho que su nueva lucha política será encabezar
el rechazo a la Reforma Laboral. “Es una reforma de los jefes de Peña Nieto y
Calderón (…) impulsada desde Washington, desde los organismos internacionales.” ha dicho Andres Manuel.
Pinshi Obama, me cae…en plena campaña y tiene tiempo para meterse con nuestra
autonomía sindical...
Así las cosas hasta el día de hoy. Será importante seguir
de cerca las decisiones que tomen ambas cámaras. La búsqueda de transparencia sindical (que
tanto han promovido analistas como Denise Dresser) podría concretarse si así lo
desea el Presidente electo, a quien habrá que recordarle que durante su campaña
habló de la transparencia como principio al que se apegaría de llegar a la
presidencia. Esta a un par de meses de colgarse la banda y ya tiene su primera
oportunidad de refrendar ese compromiso.